jueves, 17 de enero de 2008

PROTOCOLO DE GRONINGEN



Por: Blgo. César A. Ñique Carbajal

Profesor adscrito al Dpto. Académico de Ciencias de la Salud

No se trata de un acuerdo internacional de los principales países industrializados del mundo, para reducir las emisiones de gases provocadores del calentamiento global; si no más bien estamos hablando de una guía que permite acabar con la vida de recién nacidos con una “calidad de vida” muy pobre, el mismo que ha sido publicado en prestigiosas revistas como el New England Journal of Medicine y Pediatrics. Este protocolo en el cual se detallan los distintos pasos para llevar a cabo la Eutanasia en recién nacidos con enfermedad grave que experimenta un sufrimiento insoportable, pretende conseguir el consentimiento de los padres, para ser ejecutado sin ningún inconveniente en la practica medica. Esta propuesta de muerte a petición ha sido formulada por los pediatras Eduard Vergahen y Peter Sauer, de la Clínica Infantil de la Universidad de Groningen en Holanda, con el objetivo de establecer las bases legales que ayuden a evitar repercusiones judiciales, una especie de garantía para los médicos que la practican. La Sociedad Holandesa de Pediatría se ha pronunciado a favor de utilizar el protocolo.

La situación se presenta complicada para una sociedad como la holandesa, en la cual desde el año 2002 se permite a los médicos practicar la Eutanasia o colaborar en el suicidio de pacientes mayores de 18 años que lo soliciten, ahora en colaboración con las instancias judiciales, se pretende normar la eutanasia en recién nacidos debido a que no solo cuentan los 22 casos de eutanasia que han servido de antecedentes para la formulación del presente protocolo, si no que hay muchos casos que no han sido reportados, por el hecho que tanto los médicos como los padres prefieren evitar que se les investiguen.

Pero seamos críticos ante esta situación, en Holanda se eliminan personas ya no solo a petición propia, si no a juicio de parientes y médicos, que entienden que son vidas que ya no merecen vivir, estamos hablando de “calidad de vida” que en el caso de los recién nacidos con espina bífida o cualquier otra malformación, tal como lo afirma Peter Singer: “se justifica liquidar a bebes discapacitados con el objeto de hacer sitio a quienes si poseen una mayor capacidad para disfrutar de su vida”. Y porque el hombre considerar tener pleno derecho a manifestar: “Tu ya no debes existir”, sin duda la respuesta es muy compleja de responder, pero debemos resaltar que las sociedades modernas se están convirtiendo en una especie de culto al hedonismo, en donde no hay cabida para el sufrimiento, cayendo en el utilitarismo que considera al sufrimiento como el mayor de los males posibles, y cuando ya no se puede detener el sufrimiento, se acaba con la vida, pues una existencia así ya no tiene sentido, es decir ya no tiene Dignidad, porque se entiende a la dignidad humana como un punto de llegada, ligada a la calidad de vida y como un resultado de la misma.

El protocolo de Groningen evidencia dos condiciones que valoran la Eutanasia, por un lado se encuentra el llamado “pronostico sin esperanza” (mala calidad de vida) y el “sufrimiento incontrolable”, estas dos razones son suficientes para indicar que el mismo protocolo no es más que otra cosa, un instrumento para tranquilizar la conciencia de los médicos y de los padres implicados en la muerte del recién nacido, manifestación del debilitamiento moral con respecto a la dignidad de la persona.

El Dr. Calienes en su articulo publicado ¿Motivos para la Eutanasia?, nos recuerda las palabras del Santo Padre: “la grandeza de la humanidad esta determinada esencialmente por su relación con el sufrimiento y con el que sufre. Esto es válido tanto para el individuo como para la sociedad”, entendiendo el sufrimiento, al igual que la muerte como una realidad profundamente antropológica, que encuentra sentido al elevarlo de una categoría biológica a una categoría moral superior, al contrario de lo que Heidegger consideraba “olvido del ser”, en el cual el sufrimiento debe ser alejado a cualquier precio, y si no hay otra forma de eliminarlo, que eliminar al paciente, en este caso dicha eliminación esta plenamente justificada.
En la Escuela de Medicina USAT somos concientes de toda la argumentación que invade los diferentes medios de comunicación a favor de los protocolos eugenésicos que terminan en la practica de la Eutanasia, es importante resaltar que todas estas afirmaciones tienen su fundamento en las diferentes corrientes bioéticas como el sociobiologismo, la cual ha llevado la teoría evolucionista propuesta por Charles Darwin al discurso moral, donde el comportamiento es considerado, por consiguiente, moralmente bueno cuando favorece biológicamente la evolución de la especie: de esto se sigue una tendencia a sacrificar el respeto hacia el individuo por el bien del grupo en su conjunto, de favorecer el bienestar de los mas “fuertes”, de los “perfectos”, de una sociedad que pierde el rumbo sobre el verdadero valor de la vida humana. Por tal motivo buscamos fortalecer espacios de dialogo e investigación en la comunidad universitaria para una irrestricta defensa de la vida humana como fin en si mismo, concepción que es fundamentada y respetada por la Bioética Personalista.


Por: Blgo. César A. Ñique Carbajal

Profesor adscrito al Dpto. de Medicina